La perfección puede encontrarse en cualquier lugar, objeto o persona ya que por mucho que existan normas y reglas sobre ella, la perfección depende de la mirada de cada uno. Puede estar en la ergonomía de una silla de los Eames o en la delicadeza de una grieta.
Por lo tanto, la perfección puede encontrarse también en la imperfección, en el defecto.
El defecto es definido como la carencia o desperfecto de las cualidades propias de algo y tiende a entenderse como un aspecto negativo, pero ¿puede este defecto tener un efecto positivo en nosotros? ¿Puede el defecto provocar un afecto?
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.