Mapa conceptual

Las personas se relacionan con los objetos a partir de sus gestos. Gestos que hacemos cada día, repetidamente sin darnos cuenta. Los sentidos nos dan la información sobre todo lo que nos rodea. A partir del oído podemos percibir el movimiento o la vibración de los productos, el tacto nos enseña la piel, la superfície del material. A su vez, el gusto nos afirma la textura de este si lo mordiéramos. Nuestra lengua nos sirve como herramienta de análisis más profundo del material ya que es infinitamente más preciso que la palma de la mano. El olfato, comunicado directamente con la memoria cognitiva, nos traslada al pasado recordándonos una situación, un lugar, una emoción... Mientras que el impacto estético lo asimilamos mediante los ojos.
Los gestos son nuestra forma física de expresarnos. Los movimientos mecanicos que una vez interiorizados se vuelven inconsientes definen la manera de actuar con los objetos y con el espacio. Vamos dejando huella por donde pasamos, en las texturas de las cosas, deformando su forma primera...